CHERNÓBIL, ¿APRENDIMOS LA LECCIÓN?
El pasado 23 de septiembre se realizó la Cumbre de Acción Climática por parte de la ONU, unas horas antes del otro lado de los Estados Unidos se llevó acabo la 71° edición de los premios Emmy, pero, ¿qué tiene que ver una cumbre con una premiación? y la respuesta es, la magnífica serie producida por HBO, llamada Chernóbil.
Ganadora de 3 Emmy’s como “Mejor serie limitada” (por sus 5 episodios), “Mejor dirección” y “Mejor Guión”. En ella se narra el desastre ocurrido dentro de la planta nuclear de Chernóbil, en abril de 1986. La historia está dramatizada y cuenta con una alta dosis de investigación basada en gran medida en los recuerdos locales de Pripyat (ciudad “fantasma”, en la zona de exclusión de Chernóbil). Aderezada con un toque de ficción que ayuda a que los espectadores se mantengan atentos a cada una de las escenas, describe algunas de las historias, cómo lo que pasó al equipo de bomberos, quienes fueron los primeros en acudir a la planta, así como, el equipo de mineros encargados de cavar un túnel por debajo del reactor.
Cada uno de los capítulos que contiene la serie, nos cuenta lo sucedido unas horas antes del accidente, así como, las decisiones que cada uno de los involucrados tuvo a bien o mal tomar, la reacción por parte de los empleados de la planta tras la explosión, las secuelas que esto origina para todas las personas que estuvieron expuestas a la radiación, desde el personal de la planta, los bomberos y enfermeros, hasta los ciudadanos que vivían cerca y como el gobierno trata primero de minimizar y ocultar la tragedia para el resto del mundo, para posteriormente darse cuenta de todas las implicaciones que este desastre está ocasionando en la región y como sino se actúa de manera rápida y efectiva, dañará no sólo a su país sino a una parte de Europa.
Las actuaciones son perfectas, logran transmitirnos sentimientos de empatía y rechazo para cada uno de los personajes, la mayoría de ellos son reales y aunque existe un personaje ficticio que simboliza la labor de muchos científicos para enfrentar y remediar el problema, hacen creíble todo lo que vemos.
Así que, 33 años después me pregunto, ¿si habremos aprendido de Chernóbil? Cada uno de nosotros tendrá una opinión al respecto, pero lo importante es no olvidar y trabajar en conjunto para que jamás vuelva a suceder.
