Miedo a las arrugas ¿tienes ritifobia?

Hoy en día, son muchas las personas que viven preocupadas por su aspecto físico al grado de temerle a las arrugas y, como consecuencia, adquieren “N” cantidad de productos para el cuidado de la piel. Es normal que todos seamos vanidosos y queramos lucir bien frente al espejo. Pero es más importante que te gustes como persona y te valores como eres.

Cuando la obsesión por las arrugas se convierte en algo enfermizo recibe el nombre de ritifobia. Ante esta situación, es necesario optar por un tratamiento psicológico que ayude a resolver el problema permitiéndonos aceptar nuestra edad y con ello disfrutar de la vida sin angustias ni miedos. Estudios revelan que son las mujeres, en su mayoría, quienes experimentan este pánico por la aparición de arrugas o señas de envejecimiento

¿Por qué las mujeres le temen tanto a envejecer?

Actualmente, vivimos en una sociedad donde el aspecto físico es importante, lo que significa que tener una arruga, implica ser un posible peligro para el desarrollo personal y profesional. Para muchas mujeres puede significar temor a no sentirse queridas, lo que refleja inseguridad.

¿Qué hacer?

Debemos aprender a envejecer con gracia y comprender que este proceso forma parte del proceso natural de la vida. Mientras no cambiemos nuestra forma de pensar, seguirán apareciendo fobias cada vez más difíciles de tratar. Por ello, disfrutemos con madurez cada etapa de nuestra vida.

¿Cómo cuidarte?

Con los cuidados debidos, podemos hacer frente a los cambios que surgen con la edad. No dejes que las arrugas te preocupen en exceso y sigue estos consejos para mantener la piel con un aspecto saludable:

Mantén una dieta sana y equilibrada: una dieta antiedad, que incluya alimentos con propiedades regeneradoras y protectoras, puede hacer mucho más por tu piel que la cirugía estética.

Haz ejercicio regularmente: es esencial para mejorar la elasticidad de la piel..

Sé positiva y optimista: una buena salud emocional mejorará el aspecto de tu piel.

Protege tu piel del sol: la piel bronceada es un factor de envejecimiento devastador. Protégete de los nocivos rayos del sol.

Hidrata diariamente y elige tratamientos adecuados para tu piel: antes de recurrir a la cirugía estética, considera tratamientos menos agresivos, existe una amplia gama de productos para el cuidado de la piel.

Si te preocupan demasiado las arrugas consulta a un profesional. Es lógico que a lo largo de nuestra vida necesitemos ayuda para superar algunas dificultades, y una ritifobia puede ser un síntoma de que algo está fallando.