- 2 oct 2023

Desenmascarando los 'gastos fantasma'

Sin duda alguna, los famosos gastos fantasmas son otra forma de ver afectada tu economía, estos gastos que no ves, que no tienes considerados, ni presupuestados, pero que al final te dejan sin dinero, son una razón más para tener cuidado.

Aunque al principio parecen inofensivos, con el paso del tiempo este dinero podría ayudarte en otro tipo de inversión o incluso transformarlo en ahorro.

¡Que no te asusten! Mejor toma en cuenta cuáles puedes tener y cuáles puedes exterminar.

GASTOS INNECESARIOS

Existen muchos gastos diarios que se convierten en gastos fantasma porque la fuga de dinero que representan a largo plazo es considerable. Los cafecitos, botanas, antojitos, cigarros, refresquitos o incluso las compras no planeadas, las cenas y/o comidas espontáneas son gastos fantasma que debes evitar.

SUSCRIPCIONES

¿Cuentas con muchas suscripciones de ‘streaming’ y no las ocupas? Si eres de aquellas personas que estás suscrito a plataformas digitales, pero que poco ocupas, revisa cuáles son las que tienes y las que realmente utilizas, cancela las que no requieras y deja de tirar tu dinero.

SEGUROS

¿Tienes seguros? ¿Sabes cuáles? Si ves reflejado cargos sobre seguros o comisiones en tu estado de cuenta, revisa qué es lo que pagas, y evalúa si realmente te da el beneficio que deseas, de otra manera si no sabes o no tienes idea, cancela, busca mejores opciones y productos que valgan la pena.

MEMBRESíAS

Las membresías de las tiendas de conveniencia, club, gimnasio que tienes domiciliadas automáticamente a tu tarjeta se pueden convertir en un gasto fantasma, si no se les da uso. Haz una lista de los servicios que se ocupan de manera efectiva y cancela aquellos cargos que no se estén aprovechando.

Es importante revisar los gastos con base en tu presupuesto, si no lo tienes, es momento de hacerlo, y con detalle evita gastos impulsivos, innecesarios o poco significativos, analiza tus suscripciones, así como tus membresías, y si no se están utilizando, lo mejor es cancelarlas. Nunca efectúes compras basadas en emociones, ten en cuenta que el ahorro es tu aliado más valioso.