Marcando territorio con chupetones
¿NETA FEMINAS? ¿Aún siguen dejando a su novio moreteado como leproso para evitar que alguna lagartona se le acerque? ¿Creen que es sexi dejarlos donde nadie, en teoría los pueda ver?
Bueno, para todas las féminas que deciden marcar su territorio con esta vieja técnica del Vampiro Canadiense tengo el deber de informarles que los chupetones son las lesiones sexuales más comunes, pero sobre todo son poco atractivos y nada, nada sexys.
¿Qué cómo se hacen? Háganse que la Virgen les habla, aparecen al morder o succionar los puntos blandos en el cuerpo, especialmente el cuello o ya entrados en la pasión en el interior de los muslos; entonces los glóbulos diminutos llamados capilares se rompen y generan un moretón que tarda hasta semanas en desaparecer.
Además de que el moretón es espantoso debido a que la forma es bastante particular, es fácil de detectar cuando alguna boquita apasionada succionó hasta que se cansó en esa zona.
Para ese tipo de “muestras de amor” les tengo la receta del merolico de la Lagunilla:
Si mire Damita, Caballero para eliminar un chupetón, aplícale hielo los primeros 2 o 3 días no directamente sino con un trapito o bien con una cuchara fría, luego aplíquele calors, pero no del que causó la marca, de lo contrario acabará con dos y no hemos quitado el primero. Lo anterior, unos tres días.
Ahora bien que si desea desaparecerlos definitivamente, cuando aquel se abalance como si fuera el Chupa cabras, recíbanlo con tremendo cachetadón guajolotero y les prometo que no lo volverá a intentar.
Si aún creen que estoy bromeando, permítanme exponerles el caso de una mujer de Nueva Zelanda que el año 2011 sufrió un derrame cerebral por culpa de un chupetón. Su compañero de pasión le creó un coágulo de sangre en su cuello, que la llevó a una parálisis total de su brazo izquierdo y por ende, una embolia.
Así que antes de dejarte hacer o peor aún, si eres aficionada a la yugular de tu pareja piénsalo dos veces antes de pegarte un buen susto.
