top of page

BRUXISMO, EL ESTRÉS DE LOS DIENTES

A veces, cuando tomamos algunos libros, es muy común encontrar la frase “rechinó los dientes”. Aunque parece un simple enunciado, puede representar un problema del cual nunca nos habíamos percatado, el bruxismo.

Esta enfermedad, consiste en apretar o rechinar los dientes, puede ser consiente o inconscientemente y está directamente relacionado con el estrés o alteraciones de sueño.

Aunque los casos se encuentran principalmente en adultos y preadolescentes, también afecta a los niños, y se divide en diurno (si se sufre únicamente durante el día) o nocturno (cuando se presenta durante las noches). Diferenciar el horario en el que padece también ayuda a determinar su correcto tratamiento.

Puede que parezca un síntoma simple, pero el número de casos incrementa cada año. En un estudio realizado a 4 mil 590 estudiantes de Manfalore, se demostró que el 27% de ellos presentaban algún hábito dental, de los cuales el 6.2% de 3 a 6 años presentó bruxismo.



Porcentaje que aumenta con la edad hasta la preadolescencia, disminuyendo hasta la adultez donde vuelve a aumentar.

Aunque el estrés sea una de sus principales causas, también puede afectar la herencia, el ser un fumador constante, consumir algún tipo de droga, el alcoholismo, tener problemas psicológicos y de identidad, ansiedad, tener los dientes o las articulaciones desalineadas, la postura, tener malos hábitos de sueño o no mantener una correcta alimentación, entre otras.

No es una enfermedad mortal, pero se recomienda acudir regularmente con tu medico, ya que puede ocasionar ansiedad, estrés, tensión, depresión, sensibilidad muscular y a las cosas calientes, dolor de oído y cabeza, hipertrofia muscular e inflamación, pero principalmente, un desgaste en la mandíbula que puede llegar a ser difícil y costoso de reconstruir.

En el 2001 los investigadores Kato, Thie, Montplaisir y Lavigne dividieron el bruxismo en primario o secundario. El primero se caracteriza principalmente por mostrarse durante el día, se está consiente y no es generado por alguna causa médica o problema de esta índole. Mientras que el segundo va relacionado con problemas neurológicos, psiquiátricos, desórdenes de sueño o drogas.

Aunque hay muchas formas de controlarlo, lo principal es detener el dolor, evitar a toda costa los alimentos duros, como el chicle o las nueces, tomar muchos líquidos, dormir bien, evitar el estrés, masajear los músculos faciales o recurrir a las terapias de sueño.

Principalmente se debe acudir con tu médico regularmente, el cual te dará algunos ejercicios de estiramiento fisioterapéuticos para regresar a la normalidad, además de recomendar el uso de protectores bucales o aparatos como férulas para el tratamiento y, en caso de adultos, el uso de medicamentos. A pesar de ello, el encontrar una forma de calmar el estrés debe ser un punto fundamental, ya sea con algún tipo de relajación o terapia.



SÍGUENOS
  • Black Facebook Icon
  • Black YouTube Icon
  • Black Instagram Icon
PUBLICIDAD
Anunciate-abril-web-vert.jpg
ARTÍCULOS DESTACADOS
ARCHIVO EDITORIAL
whatsapp-symbol_edited_edited_edited_edi
bottom of page