5 Lenguajes de amor para tus hijos

Aunque pareciera que este artículo es sólo para quien tiene hijos, se recomienda aplicarlo con toda persona que sea valiosa para cada individuo. Pudiera parecer cursi, pero es laborioso trabajar desde tu lado más consciente el emanar de nosotros un lenguaje que viene del sentimiento más puro y que nos humaniza: El Amor.

Esta teoría viene de Gary Chapman, en donde la finalidad es que un padre o madre guíe para favorecer el descubrimiento del mundo, disfrutar momentos, vivir experiencias, etc. Esto con un enfoque de amor consciente, presente.

Lenguaje del contacto físico

Es altamente favorecedor para los niños recibir caricias, abrazos; que sientan el calor de tu persona. En un bebé es esencial que ellos se sientan protegidos, importantes, a través de sentir los brazos, manos y gestos de cariño que los padres puedan entregar.

Una vez que los padres y los niños aprendieron a comunicarse a través del contacto físico, es más fácil que haya una conexión importante, donde con sólo un toque logras rememorar tu cariño: dales tu mano cuando sientan miedo, siéntate a su lado y disfruta de sus juegos y ocurrencias. .

Lenguaje de la presencia

Dedica 10 minutos de total atención y presencia con tus hijos, para ellos el tiempo es relativo, es largo y mágico cuando tu estás jugando, mirando y riendo con ellos. Evita el móvil, las pantallas e incluso que otras personas te distraigan, focaliza tu energía, tu amor, contacto con ellos en esos minutos. Para ti es lo que tardas en preparar un café, pero para ellos puede representar un momento que siempre recuerden y lo revivan cuando necesiten sentirse plenamente amados y escuchados.

Lenguaje de acciones

Les recuerda tu cariño. Siéntanse afortunados los que, al oler la ropa recién lavada, o bien al disfrutar de la sopa, llegan a la mente recuerdos y sentimientos que aluden al padre o madre. Esos sentimientos nos recuerdan que hay alguien ocupándose de hacer mejor nuestro rededor, que se esmeran en que en cada bocado o cada detalle, dicen te amo, me importas, te cuido. Provoca que estos detalles tengan tu marca, no tiene que ver sólo con labores de casa y cocina, son detalles, por ejemplo, dejarles una nota que marque momentos.

Lenguaje de las palabras

Que la mayor parte de tu vocabulario y forma de hablar con tus hijos sea positiva, que motive al logro de objetivos y los inspire a buscar el cómo sí pueden lograr cada cosa que se propongan. No quiere decir que a todo digas que sí, se refiere a que en lugar de señalar lo malo, te esfuerces siempre en explicar cómo se espera que responda. En lugar de no juegues con la pelota dentro de la casa, cámbialo por la instrucción de dónde puede hacerlo, o bien cuál es la opción que le das para que cambie por otra actividad, por ejemplo, práctica ese tiro en el patio, tienes más espacio.

Lenguaje de los detalles

No tienen que ser caros, ostentosos o comprados, pueden ser hechos por ti, como una almohada, una cobija… Sólo reitero que debe estar tu marca en ese detalle especial. Los papás pueden saber muy bien qué es lo que más desean, esta información es oro molido, no es casualidad que la tengas, tiene el mejor fin: demostrar tu cariño. Y si agregas momentos mágicos al dárselo, prepara el ambiente, no te quitará más de 10 minutos lograr una mejor estrategia para adornar el regalo que preparaste para esa personita.

Al leer estos cinco puntos pareciera que es algo que todo mundo sabe, pero si es así, por qué elegimos no aplicarlos, no demostrarlos. No esperes otra oportunidad, inicia ya y perfecciónalo, notarás diferencias en tu personita y en ti.