top of page

3 consejos para lidiar con tus emociones (y evitar las consecuencias de reprimirlas).



El primer punto que debemos conocer sobre las emociones para comprenderlas es que no existen positivas o negativas, estas son etiquetas sociales que se les han impuesto, y ello ha influido en que sea más fácil expresar las llamadas positivas que las negativas. Pero el amor, la tristeza, el enojo, la alegría, por mencionar algunas, son sólo referentes de la forma en que filtramos y enfrentamos lo que ocurre a nuestro alrededor en función de nuestras experiencias, sensaciones, creencias, ideología, etc., y cada una tiene su función, por lo tanto, son importantes pues permiten conocernos mejor y saber por qué actuamos de una forma u otra.


Sin embargo, es por este constructo social, de buenas y malas emociones, que solemos contener lo que sentimos, creyendo que no es importante expresarlo o que, incluso causará inconvenientes. No obstante, cuando reprimimos nuestras emociones los problemas son para nosotros. Primero, porque no desaparecen, sino que se quedan dentro a un nivel inconsciente, esperando salir con fuerza ante cualquier oportunidad. Segundo, porque conlleva un gran desgaste físico, mental y emocional y a pesar de que las ignoremos toman una fuerza tal que terminan por guiar nuestro comportamiento. Asimismo, al no manifestar de manera adecuada nuestras emociones, es posible que empecemos a generar conductas des adaptativas para neutralizarlas, por ejemplo; darle vueltas a lo mismo sin descanso (algo conocido como rumia) hasta estrategias de evitación como el alcohol, las drogas, etc.


También, se ha demostrado que al tratar de eludir nuestras emociones en realidad las fortalecemos y con ello las conductas agresivas. Además, las emociones como el enojo, la tristeza o la frustración en un nivel alto y constante están asociadas al aumento de cortisol persistente en nuestro sistema lo que produce efectos nocivos para la salud como deterioro del sistema inmune, estrés e incluso enfermedades que pueden afectar el aparato gastrointestinal, o causar patologías cardíacas.


Sin duda, nuestro cuerpo es un gran aliado para reconocer lo que sentimos y en que momento, por lo que es importante darnos cuenta de las señales que este nos da para saber qué pasa y a partir de ello poder manifestar nuestras emociones de manera adecuada. La capacidad que tengamos para asimilar y experimentar distintas emociones es esencial para regularlas y tomar mejores decisiones acerca de lo que nos ocurre y no por el impulso que estas puedan generar.


¿Qué puedes hacer para gestionar mejor tus emociones?

  1. Habla con alguien de confianza puede ser un familiar, un amigo o un mentor, si sientes que la situación te sobrepasa busca ayuda psicológica.

  2. Llora si lo necesitas, lo importante es que te tomes un momento contigo para asimilar tu emoción y vivirla.

  3. Busca cómo solucionar aquello que te perturba; plantéate como podrías liberar tus sentimientos y resolver la situación.


Arranca este Año Nuevo dándote los espacios que necesitas para conocerte más, gestionar mejor tus emociones y tomar decisiones que lleven tu vida hacia donde sea bueno para ti.


SÍGUENOS
  • Black Facebook Icon
  • Black YouTube Icon
  • Black Instagram Icon
PUBLICIDAD
Anunciate-abril-web-vert.jpg
ARTÍCULOS DESTACADOS
ARCHIVO EDITORIAL
whatsapp-symbol_edited_edited_edited_edi
bottom of page